El pasado fin de semana Moscú celebró su 869º aniversario. Entre muchos actos festivos la parte masculina de mi familia eligió un viaje en un nuevo medio de transporte que ha sido inaugurado para esta fecha: el ferrocarril de circunvalación alrededor de Moscú.
La línea une entre sí las regiones periféricas de la capital rusa y por eso su trayecto no ofrece a pasajeros unas vistas magníficas o paisajes de gran belleza.
Aunque en el sur de la cuidad la vía pasa por unos lugares conocidos y aún emblemáticos de Moscú, como, por ejemplo, la zona del Estadio Olímpico Luzhnikí o hace poco construido el Centro de negocio internacional de Moscú (también llamado Moscow-City).
Pero para mí lo más interesante de esa nueva línea de transporte urbano es que tiene su historia de más de un siglo de largo y aún es un monumento de la ingeniería de principios del siglo XX.

Monumento conmemorativo a 100º aniversario del ferrocarril de circunvalación de Moscú en la estación Lijobori. La foto de Leonrid.
Fue entonces, entre el 1903 y el 1908, cuando estuvo construido el ferrocarril alrededor de Moscú. Y su paso iba por las extremidades industriales de la ciudad. La necesidad de la construcción de dicho ferrocarril surgió como consecuencia del aumento de producción y movimiento de mercancías en la capital rusa. Por primera vez Moscú se paró en atascos, pero no de carreteras sino de las vías férreas. Y su objetivo principal era descongestionar el tráfico ferroviario. Y al mismo tiempo ofrecer el movimiento de pasajeros, que en su mayoría eran obreros y trabajadores de numerosas fábricas suburbanas. El trayecto tenía y sigue teniendo la longitud de los 54 kilómetros. Pero en los años 20 del siglo pasado en estas zonas estaba organizado el transporte urbano como tranvías y autobuses, y la línea se cerró para el transporte de pasajeros aunque seguía sirviéndose para el transporte de mercancías.
Desde entonces el área de la capital se aumentó muchísimo, y ahora las zonas industriales se han convertido en barrios residenciales donde vivimos yo y mi familia, entre centenas o millones de otros ciudadanos. Y hace poco el gobierno de Moscú decidió reanudar las iniciativas seculares. Durante los últimos años cambiaron las vías férreas a lo largo de todo el círculo, construyeron las estaciones modernas, con escaleras automáticas y ascensores para las personas minusválidas, hicieron enlaces de transbordo a unas estaciones del metro, de trenes de cercanías y del transporte urbano. Todavía no todo está terminado, pero esperamos que vaya mejorándose poco a poco. Y para nosotros esta nueva línea es muy útil, haciendo la ciudad con todos sus partes mucho más accesible que antes.
Para la nueva línea construyeron los trenes especiales para el uso urbano, se llaman Lastochka (Golondrina) y presentan casi todas las comodidades para pasajeros: están climatizados, tienen espacios para el transporte de bicis y equipajes, para cochecitos de minusválidos, el acceso a internet mediante wi-fi y mucho más.
A mí me gusta que a lo largo de todo el trayecto se conservan las antiguas casetas de estaciones ferroviarias: son monumentos de arquitectura modernista de principios del siglo XX.

Foto de Leonrid

Foto de Wikipedia
Así la nueva línea del transporte urbano de Moscú une no sólo diferentes puntos de la capital sino el pasado, el presente y el futuro.
Muy interesante y muy buenas fotografías y …¡vaya cielo !
Saludos desde Zaragoza,
Yolanda
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Muchas gracias, Yolanda. Qué suerte vivir en Zaragoza, echo de menos mucho.
Saludos de Moscú.
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